Los que llevamos 30 años trabajando en publicidad nos encontramos ahora mismo en una situación profesional que nos está suponiendo una auténtica transformación hacia el mundo digital.
Transformación digital vs. Adaptación digital
Los que presumimos de ser intuitivos, nos pusimos a trabajar en ello ya hace unos años, y empezamos a adaptar nuestra agencia de publicidad hacia un marketing mucho más digital. Oímos hablar mucho sobre la digitalización provocada por el Covid, pero el marketing digital llegó ya hace unos años para quedarse. El Covid lo que provocó fue una aceleración y refrendar lo que algunos de nosotros ya sabíamos, que la Agencia de Publicidad tradicional debía adaptase o convertirse en Agencia de Publicidad Digital.
En nuestro caso particular, defendemos la adaptación de la agencia más que la transformación. Lo mismo que en su día nos tuvimos que adaptar en el diseño gráfico, sirviendo no solo editorial y gráfico, sino pasar al diseño web con su consiguiente evolución en sí mismo con el paso del tiempo.
Y lo defendemos porque hoy en día, todavía, es demostrable que la mayor eficacia en las campañas está en hacer un mix entre los medios convencionales y la estrategia digital. O, dicho de otra forma, los medios OFFline con los medios ONline. Por ello, servir los dos modelos con equipos especializados creemos que es el modelo a seguir.
La publicidad del pasado
Atrás quedan las campañas en las que conceptualizabas la idea, la diseñabas, adaptabas los originales; fundamentalmente para prensa, radio, Tv y exterior; y lo programabas en base a un elaborado y estudiado plan de medios, basado en audiencias que nos proporcionaba bien el EGM o el CIES.
¡Qué tiempos aquellos en los que los jueves eran unos días de hacer un montón de anuncios! Para EL CORREO y DEIA, para el suplemento y para generales. El famoso suplemento naranja al que se recurría en la búsqueda de empleo, además de los originales para los diferentes medios en los que siempre, con un riguroso plazo de 48h, nos teníamos que mover para el envío de los mismos.
Atrás quedan las prisas en la edición de folletos con precios, apurando hasta última hora para conocer el precio de la competencia, repasando los textos hasta altas horas de la madrugada y mandar a imprenta siempre con el miedo de que fuera con un error, una imagen mal vinculada o una tipografía rota.
¡Bienvenido a la era digital!
Y llegó lo digital. Llegaron las propuestas infinitas, llegaron los análisis exhaustivos y un mayor conocimiento de los comportamientos de los usuarios. Y, sobre todo, trabajar codo con codo con los clientes, poder saber los resultados de la campaña, qué mensaje funciona, cual no y un valor muy importante: poder corregir desviaciones, cambiar mensaje, públicos objetivos en una misma campaña.
En definitiva un trabajo de pico y pala que no termina nunca.
Toda esta adaptación ha supuesto también cambios en las remuneraciones y en nuestros honorarios. Lo mismo que para nosotros como agencia ha supuesto una adaptación y una evolución hacia los nuevos tiempos también la forma de pago en los clientes ha cambiado. Y hacerles ver que el marketing digital supone un trabajo de día a día y que ahora tienen que pagar por otros conceptos no ha resultado tarea fácil.
Así que nos movemos entre la nostalgia del pasado y la incertidumbre del futuro, porque sabemos que esto no para y lo de hoy, mañana ha caducado. La tecnología va mucho más rápida que el mundo en general.
Redactado por Iñigo González
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